28 febrero 2006

Excursión a Colonia


Pues tal y como decía ayer, hoy hemos ido a Colonia (en alemán Köln), en principio a ver el carnaval y también a hacer turismo, que ya que se va hay que aprovechar.
Bien, Colonia está un poco lejos de Darmstadt, hay que cruzar dos estados (para más referencia, consultar la compra de los billetes), el viaje duraba cerca de cuatro horas, así que a las 7 teniamos que estar en la parada del autobús urbano, que a las 7:30 salía el tren, hicimos un primer transbordo en Wiesbaden, pasamos por Rüdesheim, donde el tren se paró 15 minutos sin explicación ninguna, lo cual iba a acarrear numerosas novedades en el viaje: En el segundo transbordo en Coblenza, cuando estábamos bajando del tren veíamos como se iba el ten con el que tendríamos que haber enlazado para llegar hasta Colonia, así que después de mucho correr por la estación hemos encontrado otro tren que iba hasta Colonia, aunque este tardaba un poco más (el que se escapó era un regional y este era un cercanías), pero bueno, mientras nos llevara hasta Colonia.
Durante todo el trayecto del tren, algunos de los que venían con nosotros iban ya disfrazados (me parece que iban disfrazados de bebé, con sus pañales, biberones, chupetones y demás parafernalia) y alegrando el viaje en el tren con cantos patrióticos y todas esas cosas, es decir, dando el espectáculo, je, je, je
Cuando hemos llegado a Colonia, nada más salir de la estación de trenes lo primero que se ve es la catedral, y la verdad es que así, la primera vez que lo ve uno, impresiona un poco, aunque desde mi punto de vista, las catedrales españolas de Burgos o Sevilla no tienen nada que envidiarle a la de Colonia.
En fin, después de admirar la catedral, lo que se veía era un montón de gente de carnaval, pero un montón es un montón, no es que esté exagerando.
En fin, hemos estado dando una vuelta, viendo los "charnaques" que habían montado para los carnavales, música, pistas para bailar, casetas con comida y bebidas (sobre todo cerveza y glühwein).
En fin, allí hemos aprovechado para comer en estos puestos, y para ser originales, mi menú ha consistido en un "bretzel" y una "bratwurst", es decir un lacito de esos de pan y una salchicha blanca.
Después nos hemos bajado a ver la cabalgata, que la verdad es que había menos carrozas que las que vimos en Würzburg, pero cada agrupación llevaba un montón de carrozas, y tiraban chucherías, chocolatinas, flores y hasta incluso cajas de bombones, aunque con lo lejos que estábamos no hemos podido coger nada, lástima, con lo que me gusta el chocolate.
Después hemos vuelto a unificar el grupo, que ya andaba un poco disgregado, incluso nos hemos llegado a encontrar con otros grupos de españoles que estaban dando vueltas por el carnaval...
En fin, que con todo el grupo unificado hemos ido a una calle llena de bares/pubs a seguir con el carnaval, pero ahí ya no había quien aguantase, hacía un frio... vamos -1º ó -2º, pero encima al lado del rio y todo eso, que no había quien parase, así que nos hemos metido varios en un pub que se estaba más calentico, y así hasta que ha llegado la hora de irse y volverse para Darmstadt.
A las 19:30 salía el tren que nos ha dejado en Darmstadt a eso de las 23:30, esta vez sin sorpresas, no ha habido retrasos ni nada y sólo dos trasbordos: Coblenza y Mainz.
Eso si, todavía ha habido gente con ganas de quedarse allí de fiesta y volverse al día siguiente y es que la vida de Erasmus es muy dura para algunos.
Por cierto, que en esta excursión no íbamos sólo españoles: iban también los italianos, Erick (el noruego) y un par de suecos, para que luego se diga.
Además, hemos ido bastantes que tenemos blog:
- Rubén
- Dani
- Pablo
- Erik

6 Comments:

Anónimo said...

Yo fui la primera vez a Köln en el 92, hace casi 14 años, y repetí hace 4, y en esos 10 años, ha cambiado mucho (a peor). La encontré muy sucia, además de que alrededor de la base habían estropeado la arquitectura poniendo tiendas de souvenirs.

Tienes razón cuando dices que no tiene nada que envidiar con la de Burgos o Sevilla. Eso sí, la de Berlín creo que tampoco tiene desperdicio. Te recomiendo que vayas algún día.

Anónimo said...

Es cierto que no tiene nada que envidiar a las grandes catedrales españolas. Colonia y Friburgo son las dos únicas ciudades alemanas que he visitado.
Lo que más me impresionó de la Catedral es su altura (creo que estaba en torno a los 150 metros). Por cierto, ¿no subisteis a las torres? Desde arriba había grandes vistas, eso sí, no recuerdo haber subido nunca tantos escalones en mi vida.

Anónimo said...

en colonia huele bien? jujujujujujuju

Anónimo said...

Javi: Intentaré visitar Berlín.

Sebas: No, no pudimos subir, porque la catedral, al igual que media ciudad estaba cerrada por el carnaval.

Maik: Pues, oler, oler, lo normal a una ciudad que está de carnaval, más o menos como Granada en cruces, pero siempre puedes leer el artículo del Agua de Colonia

Anónimo said...

Jaja.. que bueno el comentario de Maik, no he podido evitar dar una carcajada, buenisimo.
Josera.. si huele como Granada en cruces.. uff... mejor no ir, ¿no? Recuerdo que este año tenía que andar entre un charco perpetuo de meados.

José Ramón Martínez Pérez said...

Bueno, lo de éste último año por lo visto fue demasiado ya...