23 abril 2006

Berlín: tercer día


Bueno, llevo un poco atrasada la crónica del viaje de Berlín, así que a ver si escribo todo antes de que se me olvide.
Tercer día en Berlín: Pues empezaron como todos los días, nos levantamos, nos arreglamos, desayunamos algo y nos preparamos para empezar a hacer turismo, fuimos a ver el ayuntamiento de Berlín, que estaba en obras y la fuente que está enfrente, después decidimos ir a visitar el Museo de Antigüedades de Berlín, donde actualmente está la colección de antigüedades griegas (y también algo de romano) y la colección de antigüedades egipcias porque están arreglando el museo, la verdad es que nos hicimos un follón, hasta que averiguamos por donde se entraba, luego se le olvidó a uno la entrada en la ropa que dejó en el guardarropa y cuando estabamos todos preparados volvimos a la entrada para recoger las audio-guías...
Bueno, finalmente empezamos por las antigüedades griegas y la verdad es que tenían una cantidad de esculturas y cerámica griegas... se ve que las compraban cuando estaban baratas y ya se sabe; también tenían colecciones de joyas e incluso trozos de una cama de madera de esa época, una vitrina llena de cascos, máscaras funerarias de Egipto de la época griega, etc. en fin, impresionante.
Si la parte griega era impresionante la egipcia no se quedaba atrás: Muchos bustos egipcios, trozos de frescos, el famoso busto de Nefertiti,
semilla y frutos sacados de las tumbas, joyas, papiros (entre ellos el Libro de los Muertos), algunas momias, aunque sin "desenvolver", en fin, impresionante, uno se queda sin palabras cuando ve tantas cosas juntas.
Después, salimos pasamos junto a la catedral.
Los italianos se habían ido por su lado (Querían ir a ver el museo de arte moderno, y la verdad es que yo con el de Múnich tuve bastante).
Nos fuimos a comer a Alexanderplatz, donde fuimos el primer día otro kebab, al final les voy a coger manía...
Después, como postre, otra vez al Dunkin Donuts, la verdad es que los Donuts están buenos, pero ya empezaban a cansar...
Después de comer nos fuimos a la catedral protestante a verla, la verdad es que es curiosa, porque es una catedral del siglo XVIII, y por lo tanto está hecha a medida de las necesidades protestantes, porque hay muchas iglesias protestantes que son anteriores a la reforma y no tienen tantas diferencias respecto a las católicas.
Rubén propuso quedarnos a misa para ver que tal, y al final nos quedamos, en fin, curiosa la misa protestante, es un poco diferente a la católica, el cura daba la misa de espaldas al público (y de cara al altar mayor), se subió al púlpito a decir el sermón, no hubo comunión, no hubo que ponerse de rodillas en ningún momento, no hubo penitencia ni nada parecido, en fin, un poco diferente a las misas católicas.
Cuando terminamos la misa nos fuimos para el albergue, allí tuvimos problemas porque las llaves las tenían los italianos y no aparecían, así que nos quedamos con las ganas de salir, porque no nos pudimos cambiar ni nada.

2 Comments:

Anónimo said...

A ver cuando pones la foto del muro y cuentas un poco la historia.

José Ramón Martínez Pérez said...

Las fotos del muro ya están, bueno, y si te interesa ya subiré alguna más a flickr.
La historia del muro, la puedes encontrar en la Wikipedia, como siempre.